La revista francesa del corazón Closer consagró su portada de a la presunta relación entre la actriz Julie Gayet y el presidente galo, Francois Hollande -cada vez menos popular por la crisis económica-, y generó una fuerte ola de reacciones políticas.
Hollande, que está en pareja con una periodista, declaró en un comunicado emitido «en nombre propio, no como presidente de la República» que deploraba las faltas de respeto «al derecho a la vida privada que tenemos todos los ciudadanos», y dejó en claro que estudia demandar a la publicación.
Medios franceses especulan con que el presidente podría demandar penalmente al semanario por haber espiado sus movimientos, acción que prohíbe el Código Civil francés.
Bajo el título «El amor secreto del presidente» y un montaje fotográfico, el semanario de chimentos Closer dedicó hoy siete páginas a su investigación sobre un rumor que en Francia circula desde hace varios meses, de una relación entre Hollande y la actriz de cine y televisión Julie Gayet, de 41 años.
La actriz, que tuvo dos hijos con el escritor y guionista argentino Santiago Amigorena, quedó en el centro de la escena. Reconocida en el medio artístico pero de relativa notoriedad, Gayet milita desde hace tiempo en el PS y participó de un spot de campaña junto a Hollande en 2012.
Esta tarde, Closer se vio obligada a retirar la foto de la cobertura y el anticipo del texto de sus sitios de Internet, luego de recibir una intimación por parte de los abogados de Gayet.
La publicación contiene numerosas fotos, pero en ninguna puede verse al supuesto Hollande de frente, dado que camina con un casco de moto para ingresar al edificio donde vive la actriz, cercano al Eliseo, el 30 de diciembre.
«Alrededor de Año Nuevo, el jefe de Estado, con el casco puesto, visita en scooter junto a su guardaespaldas a la actriz en su domicilio, donde el presidente acostumbra pasar la noche», afirma Closer al revelar un posible «affaire» y sacudir la actualidad francesa.
Pese a su costumbre de dar a conocer su portada un día antes de la aparición en los quioscos en su sitio de Internet, la publicación que hace eje en la farándula francesa e internacional publicó su presunta primicia en los últimos minutos del jueves, un día agitado para el gobierno que tras varias idas y vueltas logró prohibir una actuación del cómico acusado de antisemita Dieudonné.
El inicio del 2014 promete no dar tregua al socialista Hollande, quien a poco de llegar a su segundo año busca recuperar la confianza de los franceses, desilusionados por su política de equilibrar la economía francesa a base de ajustes y el escaso aporte de sus iniciativas para detener el creciente desempleo.
El martes, Hollande afrontará su conferencia de prensa semestral, por eso, consejeros del Eliseo reconocieron al diario Libération temer que el encuentro con centenas de periodistas sea monopolizado por las revelaciones de Closer.
La información de Closer dio lugar a numerosas reacciones políticas, pero todas en solidaridad con el presidente, salvo algunas ironías de dirigentes de la oposición a través de la red de microblogging Twitter.
«El presidente Francois Hollande, en tanto que ciudadano, solicitó respeto a su vida privada. Tiene toda la razón», afirmó el primer ministro Jean-Marc Ayrault al ingresar esta mañana a un Coloquio sobre la justicia en París.
«Estoy por el respeto de la vida privada, para todo el mundo. A partir del momento donde eso no le cuesta un centavo a los contribuyentes, cada uno tiene el derecho a que se respete su vida privada. Todo ataque contra la vida privada me enfada», declaró a la Radio RTL la ultraderechista Marine Le Pen.
El único responsable político que criticó con severidad a Hollande en su blog personal y pidió su «dimisión», fue el verborrágico diputado conservador Georges Fenech.
«Esto es un ataque moral a la imagen de Francia. Debemos preguntarnos sobre la renuncia de Hollande cuando el Jefe de Estado, que no es un ciudadano como los otros, tiene una relación ilegitima a la vista del Eliseo y va a citas amorosas con su guardaespaldas, pagado con los fondos públicos», lanzó Fenech.
Por su parte, la directora de la redacción de Closer, Laurence Pieau, estimó en la radio Europe 1 que es necesario «desdramatizar» la publicación de las fotos en su revista: «Es un presidente normal, una persona que tiene una historia y un corazón», entonó.
Según el diario Le Figaro, Closer, que afronta una «grave crisis» de ventas lanzó una tirada «excepcional» de 600.00 ejemplares a 1.50 euros.
Hollande, de 59 años, nunca estuvo casado. Desde 2007, se encuentra en pareja Valérie Trierweiler, periodista del semanario Paris Match. Antes, estuvo durante varios años en pareja con la ex candidata socialista a la presidencia en 2007, Ségolène Royal, con quien tuvo cuatro hijos.
En los últimas cuatro décadas a todos los presidentes franceses se le atribuyeron numerosas relaciones amorosas, principalmente a los conservadores Valery Giscard d`Estaing (1974-1981) y Jacques Chirac (1995-2007).
El socialista François Mitterrand (1981-1995) reconoció poco antes de morir a su hija Mazarine, nacida de una relación extraconyugal.
Pero desde 2007, el conservador Nicolas Sarkozy marcó un cambio, al no dudar en hablar de su vida privada a las revistas que se ocupan de los chismes del espectáculo y convertirse en el primer presidente francés que se divorció y vuelve a casarse en el ejercicio de sus funciones, con la cantante Carla Bruni.