El sacerdote Julio César Grassi, que está cumpliendo una condena a 15 años de prisión por abuso sexual contra menores de edad bajo su guarda, insistió con el pedido de libertad ante la Suprema Corte bonaerense.

Tras la denegatoria que sufrió en todas las instancias anteriores, incluida el Tribunal de Casación bonaerense (el órgano penal provincial), Grassi recurrió a la cabeza del Poder Judicial de ese Estado para recuperar la libertad.

La defensa de Grassi, que desde hace algunos meses está a cargo del abogado Rodrigo González, pidió que sea la Corte la que revise esa decisión, informaron hoy fuentes judiciales.

Grassi sostiene que la condena aún no está firme porque queda pendiente un pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

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