Un fiscal argentino ha imputado al presidente Mauricio Macri y a parte de su equipo por pedir el rescate al Fondo Monetario Internacional.
El fiscal Jorge di Lello ha acusado a Macri, así como al jefe de Gabinete, Marcos Peña, al ministro de Economía, Nicolás Dujovne, y al presidente del Banco Central, Luis Caputo, de «abuso de autoridad y violación del deber de funcionario público» por no haber sometido a debate en el Congreso el acuerdo con el FMI.
En consecuencia, ha pedido al juez Julián Ercolini que abra una investigación penal contra la cúpula del Gobierno argentino y que deje en suspenso de forma cautelar tanto el acuerdo, como el uso de los fondos ya recibidos.
**Renegociación del rescate con el FMI
Esto ocurre al mismo tiempo que el gobierno argentino ha empezado a renegocia en Washington con el FMI, las condiciones del rescate y el adelanto de dinero que Buenos Aires necesita para cubrir los costos de la deuda. El ejecutivo espera obtener esos fondos antes de que acabe septiembre, a cambio ha presentado a Christine Lagarde el último plan de austeridad de Macri.
«Pretendemos que (el acuerdo) sea votado en la reunión del Directorio Ejecutivo del FMI que se llevará adelante en la segunda mitad de septiembre» señaló el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, tras la reunión.
Crece el descontento social
Mientras tanto, en Argentina crece el descontento social. El descalabro del peso (que ha perdido desde enero más de la mitad de su valor) ha disparado una inflación que acabará el año por encima del 30 %. Las caceroladas y la protestas resuenan cada vez con más fuerza.
Muchos consideran un síntoma lo ocurrido el lunes por la noche, cuando un adolescente de 13 años murió de un tiro en el pecho en la provincia de Chaco, una de las más pobres, cuando trataba de saquear un supermercado.
