Al menos 12 personas han muerto y más de treinta han resultado heridas al estrellarse un avión en Kazajistán. La aeronave modelo Fokker 100 de la compañía Bek Air perdió altura poco después de despegar en la madrugada de este viernes del aeropuerto de Almatý, la ciudad más grande del país, y chocó en una barrera de hormigón antes de colisionar contra un edificio de dos plantas sin que llegase a incendiarse el fuselaje. Las operaciones de rescate, en las que participaron cerca de mil efectivos, se iniciaron justo después del accidente.

«A las 07.22 en el despegue, el vuelo de Beck Air perdió altitud y perforó una valla de hormigón, chocó con un edificio de dos pisos. No hubo ningún incendio. El trabajo de rescate comenzó inmediatamente. La evacuación de los pasajeros y la tripulación está en marcha. El número de muertos es actualmente de 14. Las circunstancias del accidente y las razones del mismo serán determinadas por una comisión especial», ha dicho la aerolínea en un mensaje de Facebook.

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